Aunque la seguridad de los pacientes durante su cuidado hospitalario es un componente esencial de la calidad asistencial, sólo comenzó a considerarse fundamental en los últimos años, gracias a la instauración del 17 de septiembre como el Día Mundial de la Seguridad del Paciente.

Cuando los pacientes reciben medicamentos siempre existe un cierto grado de riesgo que puede derivar en un evento adverso. Las situaciones de riesgo pueden ser originadas por problemas con los procedimientos, fallas en el sistema o incluso por errores con los productos que se utilizan.

Se estima que el riesgo de que una persona tenga un problema ocasionado por la atención médica es mayor al de que, por ejemplo, padezca un daño a bordo de un avión: (1 en 300 contra 1 en 1 millón). Estos 5 datos recopilados por la agencia de Naciones Unidas ayudan a graficar la magnitud del problema:

1. Uno de cada 10 pacientes sufre daños durante su internación, mayormente en países de ingresos medios y bajos. El 50% de estos perjuicios podría prevenirse.

2. El uso incorrecto de medicamentos es una de las principales causas de daños evitables y se producen como consecuencia de deficiencias en el sistema de administración, cansancio de los trabajadores y condiciones inadecuadas del entorno laboral.

3. Se estima que 14 de cada 100 internados padecen infecciones hospitalarias que podrían reducirse a la mitad con medidas de prevención tan simples como la correcta higiene de manos

4. Si bien las tasas de mortalidad perioperatoria y relacionadas con la anestesia disminuyeron en los últimos 30 años, en los países de ingresos medianos y bajos continúan siendo significativas, con más de un millón de muertes al año por complicaciones quirúrgicas y 7 millones de discapacidades post operatorias.

5. En los centros de atención ambulatoria, la falta de precisión o retraso en el diagnóstico sobrepasan al 5% de los pacientes que se acercan con algún síntoma. Estos errores a la hora de precisar cuáles son las causas de los malestares pueden causar cerca del 10% de las defunciones.

Por todos estos motivos, el Día Mundial de la Seguridad del Paciente se estableció con el objetivo de fomentar la colaboración de toda la población para garantizar la seguridad en la atención de salud y promover acciones a nivel global que ayuden a mejorar la seguridad de los pacientes y a reducir los daños que puedan afectarles.